Sugerencias
Los mejores resultados
Volver a Ideas
Antes de la pandemia de Covid, la retransmisión en directo de servicios religiosos era en gran medida una novedad. Desde entonces, los servicios en línea se han convertido en una forma generalizada de culto, y el 45% de los estadounidenses encuestados han asistido a un servicio religioso cristiano en línea durante la pandemia.
Por eso es importante que las iglesias consigan que la experiencia de la retransmisión en directo sea lo más parecida posible a la presencial. Para ello, se necesitan algunos conocimientos audiovisuales, además de estos consejos y trucos para la retransmisión en directo, y conseguirás la experiencia y el sonido ideales.
Lo ideal es que la retransmisión en directo de la iglesia sea discreta y esté mezclada específicamente para su aplicación en línea. Esto se debe a que lo que funciona en la iglesia no tiene por qué trasladarse a la perfección a una retransmisión. Los santuarios tienen "firmas" acústicas, como el timbre de su reverberación, que crean una conexión emocional entre el pastor, el coro, la banda y el público. Es fundamental captar y transmitir estas características a través de Internet.
Sin embargo, el entorno de culto en línea es diferente. La mezcla de audio en línea debe constar de los mismos elementos que se escuchan en persona -el sermón, los anuncios y la música en directo-, pero hay que encontrar un equilibrio adecuado para la plataforma. La mejor forma de conseguirlo es utilizar un "splitter" para crear una segunda vía paralela de señales de audio desde la consola de mezclas de la sala y enviar esos elementos directamente a una consola separada operada por alguien que se dedique exclusivamente a la mezcla de streaming.
La inspiración desempeña sin duda un papel fundamental a la hora de pronunciar un gran sermón, pero sin el equipo y las técnicas audiovisuales adecuados, parte de la magia puede perderse en la transmisión.
Lo ideal es captar un cierto nivel de la firma acústica del espacio para realzar la sensación en persona. Para incorporar algo de eso, coloca un par de micrófonos estéreo en soportes cerca de la posición de mezcla de la casa. La salida de esos micrófonos, ayudada por un toque de compresión, puede mezclarse con la mezcla discreta transmitida, dando a los oyentes la sensación de estar allí. Alternativamente, un toque de reverberación en la propia mezcla también puede proporcionar un ambiente similar.
Conseguir que el sonido de la casa llegue al flujo en línea también significa elevar al máximo la calidad del sonido interno. Esto significa que el sistema de sonido instalado debe ser capaz de controlar la firma acústica evitando que el sonido rebote en las superficies reflectantes e inhiba la inteligibilidad de la voz.
Bose ProfessionalLa tecnología DeltaQ ofrece una solución excelente. El conjunto de altavoces puede dirigir el sonido con precisión a las zonas de audiencia para obtener la mejor calidad de sonido y claridad vocal posibles. El sonido estéreo de la sala, claro y limpio, mezclado con el audio discreto procedente del splitter de la casa, garantiza una experiencia "tú estás allí" para el participante remoto en el culto.
Lo ideal es que la persona que mezcla el audio en streaming pueda trabajar desde una posición separada y acústicamente aislada de la mezcla o del frente de la sala para escuchar y mezclar cada elemento con claridad. Sin embargo, eso no siempre es factible; a veces la mezcla en streaming debe hacerse en el mismo espacio. En ese caso, el uso de auriculares de calidad puede resultar rentable, ya que el aislamiento acústico permite crear una mezcla en streaming independiente del espacio en directo.
Los auriculares -con cable o inalámbricos- pueden proporcionar un alto grado de aislamiento al técnico de mezclas. Además, gracias a la tecnología Bluetooth, el técnico de mezclas puede trabajar desde una plataforma inalámbrica, como un iPad, lo que permite comprobar el sonido y el equilibrio desde varios lugares de la iglesia.
La inspiración desempeña sin duda un papel fundamental a la hora de pronunciar un gran sermón, pero sin el equipo y las técnicas audiovisuales adecuados, parte de la magia puede perderse en la traducción. Conseguir que la señal coopere a través de un gran sistema de sonido, una cuidadosa mezcla y retransmisión, y un meticuloso refinamiento contribuirá en gran medida a garantizar una gran retransmisión en directo en la iglesia.